miércoles, enero 13, 2010

Esplácnica



El devorador esta masticando las articulaciones,
saborea una presa estéril con la vision desconectada de quien es, a su vez, triturado.

Y se empeña en mirar por la ventana,
buscando los gemidos de una plaza infestada de gatos,
mientras los jirones de carne se descuelgan distraidos:
un zumbido,
cada vez más profundo,
tan constante que resulta sencillo acostumbrarse.

La memoria del animal ciego.

***

Toda la informacion se amontona desordenada,
no hay otra manera.
Una desesperación de cavidad sanguinolenta, palpitante, se arrastra trabajosamente
y se instala.

El reflejo habitual en estos casos es el espasmo ahogado, y una esperanza pálida, casi masoquista.
La acción continuada de unos premolares sanos suele desencadenar esculturas amorfas e interesantes,
involuntarias.

Con el tiempo, se llega a un estado similar al de los tejidos más superficiales.


"La polaridad del metalhidruro es la consecuencia directa de la circulacion electrónica"


Una conclusion de razonamiento errático le adentra un poco más,
mientras siga tragando su propia carne.